Durante
mi pasado cumpleaños (13 de octubre), (PD gracias por los deseos de
todos los que me felicitaron), durante todo el día recibí cientos de
felicitaciones, tanto por el BBM, por el Facebook y por el Twitter, como
todos han cumplido años estoy seguro que saben a lo qué me refiero.
Cuando
me senté a revisar y leer todas las felicitaciones, llego un punto en
el que ya no quería leer más y dejarlo ahí, pues eran muchas, entonces
como estoy haciendo muy a menudo me puse a pensar en que podría eso
significar cristianamente y cuando lo pensé entendí que debía leer todas
y cada una de las felicitaciones e incluso les di a “me gusta” o hice
algún comente en los comentarios. Seguro te preguntaras que fue lo que
pensé….
Pues
resulta que me puse a pensar en todas las personas que están
constantemente hablándole a Dios, ya sea para pedirle algo, para
adorarle, para darle gracias, o para cualquier cosa y resulta que el
“Facebook de Dios automáticamente se llena de miles de millones de
notificaciones de personas que escribieron en su muro” y si por ejemplo
El dejase pasar o no le prestara atención a una de estas notificaciones
puede ser que alguno de sus hijos pase por un mal rato…
Dios
está todo el tiempo pendiente a nuestras oraciones y pendiente a lo que
nosotros hacemos, Él nos cuida y tiene un cuidado especializado con
cada uno de nosotros, para ser amigo de El solo tienes que revisar en
tus solicitudes seguro que ya tienes alguna solicitud de amistad que
ignoraste o no le has prestado atención.
Juan Carlos Castillo
Corazón Joven
JPC Rep. Dom.
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